Durante horas de la mañana del viernes 4 de marzo, en el Salón de Actos «Juan B. Alberdi» del edifcio principal de los tribunales tucumanos, se realizó la ceremonia de Apertura del Año Judicial 2022, encabezada por el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Daniel Leiva, junto a los y las vocales Antonio Estofán (representante suplente ante el CAM), Claudia Sbdar y Eleonora Rodríguez Campos. Participaron además, desde el estrado, el Ministro Público Fiscal, Edmundo Jiménez, y el Ministro Pupilar y de la Defensa, Washington Navarro.
Por razones sanitarias, el acto tuvo concurrencia limitada a presidentes de cámaras, colegios de jueces y de tribunales de impugnación de los distintos centros judiciales e invitados especiales. Asimismo, a fin de que el público en general tuviera acceso, fue transmitido en vivo a través del canal de Youtube de la CSJT.
A continuación, se comparte en este espacio el discurso pronunciado por el presidente del alto tribunal:
«Señoras y señores Vocales de esta Corte Suprema de Justicia aquí presentes, Señores Ministros del Poder Judicial, Magistrados y Magistradas, Funcionarios y Funcionarias, Invitados e Invitadas especiales, tengan Uds. muy buenos días.
En la apertura del presente año judicial, y en la compleja coyuntura sanitaria que nos toca atravesar, quisiera expresar el agradecimiento de esta Corte Suprema de Justicia que hoy me toca presidir, a todos los actores judiciales: jueces y juezas, funcionarios y funcionarias, empleados y empleadas, fiscales y fiscalas, defensores y defensoras, abogados y abogadas, procuradores y procuradoras. Ellos son quienes han posibilitado, con su trabajo y esfuerzo, llevar adelante los cambios impulsados a partir de la incorporación de nuevas plataformas de trabajo, a fin de que todo aquel que necesitara transitar un proceso judicial durante el tiempo de emergencia sanitaria, pudiera acceder al servicio de justicia.
También quisiéramos agradecer, de manera especial, a todo el personal de la salud de la Provincia de Tucumán por la ardua labor que llevan a cabo en este contexto tan difícil y doloroso: a los médicos y médicas, enfermeros y enfermeras y a todos los auxiliares de este sector, que trabajan denodadamente en la atención de nuestros co-provincianos. El Poder Judicial no sólo reconoce el compromiso y la responsabilidad en su trabajo cotidiano sino que ratifica el respaldo y sostenido acompañamiento a la autoridad sanitaria, en estos casi dos años de emergencia con motivo de la pandemia.
Vivimos una época de cambios vertiginosos, por lo que necesariamente en este acto hablaremos de pasado y futuro, de lo que hicimos y lo que vamos a hacer, pero especialmente de rumbos y metas. Quiero hablar de trabajo.
El Poder Judicial debe continuar en su camino de reforzar perspectivas y diligencias para estar a la altura de los grandes temas que resultan transversales a toda la sociedad: la problemática criminal; la violencia de género; la vulneración de los derechos de los consumidores; la conflictividad de intereses patrimoniales; entre otros tantos que, como se dijo, repercuten en toda la comunidad.
En tal sentido, el objetivo y el desafío serán siempre mejorar el servicio que brindamos a la sociedad como uno de los Poderes del Estado. La línea rectora es lograr mayor inclusión, acortar distancias, facilitar el acceso a la justicia, comunicarnos con un lenguaje claro y accesible y brindar una respuesta en tiempos razonables y útiles, en términos de vida del ser humano. Se trata, en definitiva, de hacer realidad el mandato de ofrecer una tutela judicial efectiva, en clave de derechos fundamentales y de derechos humanos, especialmente a toda persona en situación de vulnerabilidad agravada.
Consideramos que la forma para lograrlo es simplificando y modernizando los procesos, sistematizando técnicas de apoyo y brindando herramientas a jueces y juezas y a sus equipos de trabajo. Para ello, nuestros sectores de soporte técnico y de gestión altamente capacitados trabajaron de manera coordinada con ellos, respetando sus autonomías jurisdiccionales, fortaleciendo el trabajo en equipo y el diálogo fructífero que permitió acelerar y mejorar en el día a día el expediente digital con un impacto positivo en la totalidad de procesos. Este es el modelo de trabajo que desde la Corte vamos a profundizar.
Por ello, acorde con ese objetivo, también se han emprendido cambios en lo edilicio teniendo en cuenta el nuevo soporte digital sobre el que trabajamos el expediente y la mayor oralización de los procesos en los distintos fueros que pretendemos lograr en el corto y mediano plazo. Tenemos un plan actualmente en marcha de refuncionalización de distintas unidades, habiéndose iniciado dicho trabajo en los juzgados de familia, a través de la optimización de espacio producido por el cambio de soporte, con la consiguiente despapelización, que se irá ampliando a los distintos fueros ubicados en el Palacio de Justicia, en una primera etapa.
También comenzamos la readecuación de los Juzgados de Paz, habiéndose inaugurado salas de audiencias multifueros, en una primera etapa, en los Juzgados de Paz de Aguilares, de Alberdi, de La Cocha, de Trancas y de Amaicha del Valle, con el fin de que aquellas personas que no cuenten con herramientas tecnológicas o que manifiesten alguna dificultad para trasladarse a determinados centros judiciales puedan participar de las audiencias y entrevistas virtuales y semipresenciales desde dependencias judiciales de la justicia de paz que se encuentren cerca de sus domicilios.
Dicho avance comienza a ser posible, entre otros factores, a partir de la regularización sobre el dominio de los inmuebles de los Juzgados de Paz llevada a cabo el año pasado, por lo que ya nos encontramos en condiciones de iniciar la construcción de nuevas sedes, así como proyectar para este año remodelaciones mayores y mejoras en un importante número de juzgados a lo largo de toda la geografía provincial.
A través de las medidas descriptas, entre otras, el objetivo es el fortalecimiento de la justicia de paz, con la mirada puesta en las necesidades locales, teniendo presente las peculiaridades de las diferentes zonas del interior provincial, logrando de esa manera una mayor apertura del servicio de justicia.
También se realizaron obras nuevas de gran envergadura, como el recientemente inaugurado edificio del Centro Judicial de Monteros, que cuenta con cinco plantas dotadas de salas de audiencias penales y civiles y toda la tecnología necesaria para un correcto funcionamiento del servicio, con un diseño que lo convierten en un ícono arquitectónico en el interior de la provincia.
El próximo paso en el interior provincial será la edificación de la nueva sede del Centro Judicial del Este, para lo cual la Corte Suprema de Justicia adquirió un terreno a tal efecto, ubicado en la ciudad Banda del Río Salí. Allí se iniciará este año la construcción de un edificio de más de 6.500 metros cuadrados en 4 niveles: subsuelo y 3 plantas, lo que será fundamental para la consolidación de este nuevo Centro Judicial, cuya jurisdicción abarca a más de 320.000 personas. El llamado a licitación se encuentra en trámite de aprobación por la Corte Suprema, contando con la partida presupuestaria al efecto.
Estas mejoras en la infraestructura son necesarias para la plena implementación de las reformas procesales que estamos emprendiendo en los diversos fueros.
Así, en el fuero penal, se puso en vigencia el nuevo Código procesal, primero en Concepción en el año 2019 y luego en los Centros Judiciales Capital y Monteros a partir de Setiembre de 2020. Desde allí, el Poder Judicial ha venido trabajando arduamente en optimizar la gestión de los conflictos de naturaleza penal dentro de la lógica adversarial.
Prueba de ello, es el dictado de 2517 sentencias (de condenas o absoluciones) durante el año 2021. De ese total, 2.076 (más del 80%) corresponden al Código nuevo. El número total de las resoluciones mencionadas es casi idéntico a la suma total de las sentencias dictadas en los últimos cuatro años anteriores. Esto da cuenta de la especial dinámica que se le dio al tratamiento de la temática criminal a partir de la puesta en vigencia del Código Procesal Penal ya mencionado, provocando una verdadera transformación para el fuero.
A los fines de un mejor dimensionamiento resulta oportuno mencionar algunos indicadores sobre la actividad llevada a cabo dentro del marco fijado por la norma referida, sumado a una eficiente gestión: durante el último año, y en plena pandemia, se realizaron 16.472 audiencias, con 2.253 prisiones preventivas otorgadas. Se celebraron, además, 172 juicios orales y públicos. En ese sentido, y solamente en relación a delitos cometidos a partir de su entrada en vigencia, durante el año 2021 fueron condenadas 2.234 personas en el sistema adversarial.
No se trata de números fríos. Somos conscientes que detrás de ellos, está el dolor de las víctimas y sus familias; y anhelamos que una respuesta institucional oportuna y eficiente contribuya a cerrar etapas y cicatrizar heridas.
El camino emprendido también ha impactado en todos los fueros civiles, donde se ha generado una dinámica de trabajo virtuosa, al brindárseles las herramientas tecnológicas a través de nuestras nuevas plataformas digitales. Así es como las unidades jurisdiccionales pudieron dar una respuesta a los justiciables, quienes de manera remota accedieron a poder presentar sus demandas, contestar las mismas, notificarse de providencias, efectuar y recibir pagos, participar de audiencias, impulsar los procesos en todas sus etapas y en especial obtener el dictado de sentencias con una efectiva tutela de sus derechos, no obstante el contexto sanitario ya aludido.
Los números de los indicadores antes mencionados reflejan un gran trabajo y compromiso de los distintos estamentos de la administración de justicia, con una producción judicial anual del 2021 ampliamente superior a la de años anteriores, lo que da cuenta que la modalidad digital es más productiva, ágil, y brinda un mayor acceso a justicia. Para mayor información, los números aludidos, con rigor estadístico, pueden ser compulsados en la página web oficial del poder judicial.
Queremos destacar el trabajo de los recursos humanos de este Poder Judicial, ya que logramos a partir de su esfuerzo y compromiso, generar un expediente digital de avanzada, al punto de convertirnos en pioneros y referentes a nivel nacional, con soberanía informática judicial y capacidad de diseñar sistemas propios, en una auténtica muestra de construcción colectiva con la participación de todos los estamentos que lo componen.
Creamos la plataforma informática Alberdi, que está integrada por las diversas aplicaciones que conforman el expediente digital tucumano, que además de estar cumpliendo con su cometido, esta Corte desinteresadamente y con una plena convicción federal, ha puesto a disposición del resto de los Poderes Judiciales de las provincias y así avanzamos en suscribir convenios con algunas de ellas que actualmente se encuentran en implementación.
Quizá uno de los mayores logros del expediente digital es que ahora es auténticamente público para todos los justiciables, que pueden seguir la agenda de audiencias y sus causas desde un teléfono celular o desde una computadora. Esto se aplica en todos los procesos judiciales, salvo los legalmente reservados en el ámbito penal y de familia. Para garantizar este derecho a quienes necesitan asistencia o medios técnicos, se han habilitado mesas de ayuda virtuales, con personal calificado, en los distintos centros judiciales y en Juzgados de Paz ubicados estratégicamente en el territorio provincial, para ampliar los canales de comunicación y acercar el Poder Judicial a todos los segmentos de la sociedad.
Para consolidar en el tiempo este salto de calidad en el servicio de justicia, se decidió avanzar en la construcción de un nuevo Data Center para nuestro Poder Judicial, con los más modernos componentes de hardware de procesamiento y almacenamiento para soportar los servicios de red básicos, toda la Plataforma Alberdi de software y el resto de las aplicaciones en uso por el Poder Judicial. La licitación pública se encuentra en trámite actualmente, y estimamos tenerlo en pleno funcionamiento en un plazo no mayor a los 6 meses. Este nuevo Data Center pasará a ser el más importante en toda la región norte del país y nos permitirá triplicar los recursos actuales y redistribuir capacidad operativa en los Centros Judiciales Concepción y Monteros, consolidando al Poder Judicial de Tucumán como referente en este campo.
Son muchas las mejoras que se fueron implementando y que se encuentran programadas para el corriente año; pero quiero destacar, entre otras, las siguientes:
- La posibilidad de librar oficios digitales con más de 300 entidades externas y comunicaciones digitales con más de 45 unidades del Ministerio Público Fiscal y 40 del Ministerio Público de la Defensa; números éstos que se irán ampliando en el tiempo.
- El libramiento de cédulas con código QR, como prueba piloto, en las notificaciones al domicilio real, desde los seis nuevos Juzgados del Trabajo totalmente digitales del Centro Judicial Capital y del juzgado del Trabajo del Centro Judicial de Monteros; proceso que continuará replicándose progresivamente en el resto de los fueros.
- Pusimos a disposición de las unidades jurisdiccionales un sistema bancario online para generar el alta de cuentas judiciales, efectuar la consulta de saldos, libramiento de órdenes de pago o constitución de plazo fijo, entre otras prestaciones.
- Se escanearon a la fecha, conforme lo programado, casi 25.000 expedientes de los fueros penal, civil y comercial común, familia, contencioso administrativo y secretaría judicial de la Corte, con la producción de más de 5.500.000 imágenes escaneadas por la Oficina afectada a tal fin. Lo expuesto posibilitó un importante avance en la despapelización y destrucción de legajos, expedientes y documentación dentro del marco normativo vigente, proceso éste que seguirá su curso el corriente año, con el propósito de permitir un mejor aprovechamiento del espacio físico en las diferentes dependencias.
- A las 2 Salas de audiencias multifueros totalmente equipadas existentes en el Palacio de Justicia, se sumaron 2 más inauguradas a finales del año pasado en el fuero Laboral en el edificio de calle Crisóstomo Álvarez, y está proyectada la creación de otras 2 salas de audiencias multifuero en el edificio de calle Lamadrid, para propiciar la ampliación de la oralidad. También se inauguró 1 sala completamente equipada en Concepción.
- Se continuarán empleando las licencias de 110 salas virtuales para audiencias remotas y mixtas, hoy en funcionamiento y debidamente coordinadas, para su eficiente empleo en todos los fueros.
- La Próxima creación de 3 nuevas Salas de Cámara Gesell, que se sumarán a las ya existentes, para agilizar los procesos relacionados con abusos sexuales a niños, niñas y adolescentes.
También debemos destacar que nos encontramos próximos a la implementación del nuevo código procesal civil, cuyo anteproyecto, fruto del trabajo interinstitucional e inter poderes, actualmente se encuentra en la legislatura provincial y próximo a ser tratado, conforme lo manifestado públicamente por la máxima autoridad de dicho poder. El nuevo código traerá cambios innovadores e implica reformar definitivamente un modo de administrar justicia que tiene sus raíces, básicamente, en la época colonial. Hace 200 años el mundo era totalmente distinto. Sin embargo, muchos de los Poderes Judiciales siguieron funcionando, en gran medida, bajo el mismo paradigma jurisdiccional de antaño, basado en la sacramentalidad de las formas.
Lo alcanzado nos alienta a profundizar el camino emprendido. Así, queremos avanzar en un Plan de Gestión de Calidad en la Justicia con la implementación de Normas ISO 9001 en la mayor cantidad posible de unidades jurisdiccionales y no jurisdiccionales, contando nuestra institución con personal judicial que culminó las capacitaciones recientemente, para tener una implementación exclusivamente a cargo de recursos humanos propios, pero con certificación de auditores externos al Poder Judicial. Para lograrlo, venimos trabajando en el rediseño de las capacitaciones, con la mejora del proceso de relevamiento de necesidades, la generación de procesos de capacitación por estamentos de las y los magistrados, funcionarios, empleados y ordenanzas; y la creación de un banco de formadores externos e internos.
La Corte, a través de una acordada reciente, invitó a todas las unidades jurisdiccionales y no jurisdiccionales a sumarse a este Plan de Gestión de Calidad, que ya tuvo su primera concreción trascendente en la entrega de la Certificación Norma ISO 9001 por parte del Instituto Argentino de Normalización y Certificación (IRAM) a una oficina de esta Corte Suprema de Justicia.
Continuando con las prioridades estratégicas de esta Corte Suprema, podemos resaltar:
- La promoción y protección de la salud física y psicológica de los agentes judiciales y la especial atención de las situaciones de violencia laboral con perspectiva de género, a través de la intervención de la Comisión ya creada a tales fines.
- La mejora continua del sistema de ingresos por concursos del Poder Judicial, para atender los nuevos paradigmas de oralidad: preparación y realización de audiencias;
- La ampliación de los canales de atención al público y su orientación a la nueva realidad digital de la plataforma de trabajo.
- El fortalecimiento del proceso de inclusión laboral de los colectivos transgénero, con la incorporación de la temática a las capacitaciones judiciales.
- La permanente inclusión laboral de personas con discapacidad, con actividades de acompañamiento y evaluación periódica.
Consideramos relevante, además, poner en valor el conocimiento jurídico expresado en obras producidas en la provincia, que cuenta con tres universidades con carreras de grado, para el estudio del Derecho, a las que se suman universidades que ofrecen carreras a distancia. Por una acordada reciente, esta Corte hizo una convocatoria a los juristas que hayan publicado libros de su autoría y, a sus descendientes -según el caso- para adquirir tales obras para el Poder Judicial y ponerlas a disposición en nuestra Biblioteca Juan Heller. Este proyecto incluye a los autores de todos los estamentos judiciales, del Ministerio Público Fiscal y del Ministerio Pupilar y de la Defensa, de los Poderes Ejecutivo y Legislativo, Colegios de Abogados, Colegio de Escribanos, Colegio de Procuradores y, en general, a todos los autores tucumanos o que residan en la provincia.
Estamos convencidos de que estas múltiples políticas y proyectos, con un trabajo coordinado entre las y los magistrados, funcionarios, empleados de juzgados, Cámaras y Corte; los directores y equipos de trabajo de todas las áreas administrativas; directivos y asociados a los Colegios de Abogados y de Procuradores, y el diálogo interinstitucional, permitirán mejorar y modernizar aún más el servicio de justicia, creando lazos que aseguren el pleno disfrute de los derechos y garantías consagrados por nuestra constitución nacional, tanto a los habitantes de los centros urbanos, como así también de las comunidades rurales y del interior profundo. Pretendemos cumplir uno de los mayores objetivos que nos propusimos como Poder Judicial: garantizar el acceso a la justicia para todos los justiciables de la provincia. Tal lo manifestado.
Nos encontramos en un momento histórico y propicio para construir con la sociedad un tejido de institucionalidad basado en la confianza y credibilidad en el Poder Judicial, lo que habrá de lograrse profundizando el camino que hemos decidido transitar. Los esfuerzos centrados en remover los obstáculos, facilitar el acceso al servicio de justicia y ofrecer respuestas en plazos razonables, permitirán dejar atrás reclamos de larga data y enmendar las deficiencias en las que, a lo largo de la historia, podamos haber incurrido.
Como presidente de esta Corte Suprema, que forma parte de una generación (a la que también pertenecen mis pares, en mayor o menor medida), formada en el sistema escritural y en una determinada modalidad de administrar justicia, hoy quiero asumir un compromiso: el de propiciar las condiciones para que este Tribunal, como desafío de época, se erija en puente, tanto con las nuevas generaciones de nativos digitales como con aquellos que, sin serlo, hoy exigen una mayor dinámica en la resolución de sus conflictos.
Convoco a todas y todos los aquí presentes, en lo que a cada uno les competa, a poner todo el esfuerzo para trabajar de manera definitiva en una nueva gestión judicial, que confíe en nuestros recursos humanos, en la capacitación permanente, en la sistematización de procesos, en la modernización tecnológica, la accesibilidad y la mejora continua.
De esta manera damos inicio al año judicial 2022.
Muchísimas gracias a todas y a todos; y que Dios los bendiga.»
Fuente: Dir. de Comunicación Pública de la CSJT.